Piernas hinchadas por retención de líquidos: causas y cómo combatirlo
La retención de líquidos es uno de los problemas más comunes que se dan en casos de obesidad y en edad avanzada. Hace referencia a la acumulación de líquido en los tejidos del cuerpo. La retención de líquidos en las piernas y en los muslos es muy común. Las extremidades inferiores son una de las zonas donde aparece este problema con mayor probabilidad.
La retención de líquidos en las piernas se relaciona con una serie de síntomas que generan unas consecuencias negativas para la persona. Entre estos síntomas se encuentran:
- Piernas cansadas: se relacionan con sensaciones de hormigueo, pesadez e incluso picor a lo largo de esta zona.
- Aumento de peso: el cuerpo presenta una incapacidad para eliminar el exceso de líquido. Esto hace que su acumulación derive en un aumento de peso.
- Inflamación en las piernas: la retención de líquidos genera en muchas ocasiones problemas de circulación que dan lugar a hinchazones.
- Mayor probabilidad de padecer celulitis: cuando la retención de líquidos en los muslos se prolonga, es posible que aparezca celulitis.
- Menor flexibilidad en las articulaciones: se observa una disminución en la flexibilidad de algunos puntos de las piernas y los tobillos.
Causas de la retención de líquidos en las piernas
La retención de líquidos en las piernas puede aparecer por diferentes motivos. Las causas pueden tener un origen biológico, genético o derivado de hábitos inadecuados. Es importante encontrar el origen de este problema para poder llevar a cabo unas pautas concretas para solucionarlo. Entre las causas más comunes se encuentran:
- Causas genéticas: hay una predisposición genética a desarrollar retención de líquidos. Este factor no es determinante, ya que solamente representa un porcentaje del origen. El estilo de vida que adopta cada persona en interacción con la predisposición genética puede dar lugar o no al problema.
- Causas hormonales: la retención de líquidos en piernas se relaciona principalmente con mujeres porque son las que sufren más cambios hormonales. Es común que aparezca a lo largo del síndrome premenstrual, por la píldora anticonceptiva y en mujeres embarazadas.
- Alimentación: los alimentos que cuentan con elevados niveles de grasas y sal pueden propiciar la aparición de retención de líquidos en muslos y piernas. Además, la ingesta de alcohol y consumo de tabaco también se han relacionado con el origen y mantenimiento del problema.
- Estilo de vida y hábitos inadecuados: el uso de tacones, permanecer mucho tiempo sentado o de pie, y adoptar un estilo de vida sedentario son algunos de los factores que se han relacionado con esta patología.
- Presencia de enfermedades: algunas enfermedades vasculares, renales, cardíacas o hepáticas pueden relacionarse o dan lugar a la aparición de retención de líquidos.
Cómo combatir la retención de líquidos en las piernas
Es importante tener en cuenta que hay algunos factores que no se pueden modificar o cambiar directamente, como los relacionados con elementos genéticos o biológicos. Sin embargo, otros motivos como el estilo de vida pueden modificarse a través de pequeñas pautas. Es conveniente tomar conciencia de ello y aplicar pequeños cambios en la rutina diaria para solucionar esta situación.
Cambios en la alimentación
Es imprescindible reducir la ingesta de sodio y aumentar los alimentos frescos como las frutas, verduras, carnes y pescados. Es muy importante dejar de lado toda la comida procesada y evitar todo lo que puedas algunos productos:
- Reduce los lácteos que contengan un nivel elevado de sal.
- Olvídate de las salsas y la comida precocinada.
- Prescinde de salados como patatas fritas, frutos secos, etc.
- Deja de lado los alimentos en conserva, así como los embutidos, ahumados y patés.
- Elimina o reduce la ingesta de alcohol y tabaco.
Actividad física
El ejercicio ayuda a activar el cuerpo y la circulación. De esta manera, se reduce la retención de líquidos. Algunos deportes como caminar, natación o yoga son muy buenos. Es suficiente con 30 minutos de actividad física al día. Si cuentas con poco tiempo o algunos días es complicado sacar tiempo, puedes puedes adoptar pequeños hábitos a lo largo del día:
- Sube por las escaleras siempre que tengas ocasión.
- Aparca un poco más lejos o bájate una parada antes en el transporte público y ve andando.
- Ponte una alarma en el móvil cada 30 minutos y levántate de la silla para estirar las piernas y moverlas.
- Pon las piernas en alto.
Aquí te dejamos una serie de ejercicios para mejorar la circulación de las piernas y evitar la retención de líquidos.
Aquilea Drenante
Contribuye a la eliminación de líquidos acumulados en el organismo
Beber líquidos
Beber agua favorece la correcta actividad renal y contribuye a eliminar líquidos del organismo. Es recomendable beber como mínimo 1,5 litros de agua al día. También puedes ingerir otras bebidas como infusiones.
Una posibilidad que te ayuda en gran medida a reducir la retención de líquidos es Aquilea Drenante. Para ello, tan solo tienes que diluir su contenido en un litro de agua y beber a lo largo del día. De este modo, además de beber agua, Aquilea Drenante contribuye a reducir la retención de líquidos. Esto es posible gracias a la combinación de sus 8 extractos naturales entre los que se encuentra:
- Cola de caballo: cuenta con propiedades drenantes y además es depurativa.
- Ulmaria: presenta efectos antiinflamatorios y diuréticos. Asimismo, tiene una propiedad antiséptica que ayuda a combatir la retención de líquidos.
- Hibisco: presenta efectos diuréticos, favorece la eliminación de toxinas y complica la retención de líquidos.
- Rabos de cereza: su acción diurética contribuye a la secreción urinaria.
- Abedul: estimula la micción, ayuda a combatir la retención de líquidos, y contribuye a la eliminación de toxinas.
- Ortiga: acción depurativa y diurética.
- Ortosifón: cuenta con un efecto antiinflamatorio y diurético.
- Grama: destaca por sus propiedades depurativas.